En el año 2013 como much@s sabéis, me trasladé a vivir a Fátima para cumplir con la misión que allí me llevo durante cinco años, a final de enero de 2014, la verdad es que no recuerdo en estos momentos si fue la Madre, o Babaji, quien me dijo: ¿Te has fijado que el 2 de febrero es el día 33 del año?, enseguida fui a por un calendario y conté los días y efectivamente, comprobé que el 2 de febrero, es el día 33 del año
Como también much@s sabéis el número 33 es el número de la energía cristica, y siguió diciéndome: el día 2 de febrero, porta la energía cristica, la energía del fuego del Espíritu
Hoy, el fuego del Espíritu está encendido y su LUZ lo ilumina todo
Particularmente a mi, la Fuerza del Fuego del Espíritu, ha hecho que ponga orden y sin poder callarme, hable alto y claro cosas que debía decir, ha sido como un volcán en erupción, ese Fuego ha provocado la erupción en mi, una erupción que viene a ponerle nombre y claridad a muchas cosas
Esto es Sanación, lo contrario es Represión. Y por tanto aquí hay AMOR
También, el alma de una persona muy importante para mi, se ha comunicado conmigo desde el corazón y con humildad y esto ha sido muy emocionante para mi. El Fuego del Espíritu impulsa al corazón a la comunicación desde el AMOR
Para quienes no lo sepan, decir que en el año 2018, me trasladé desde Fátima a Luelmo de Sayago (zAMORa), donde sigo con la misión